La sangre del Olimpo, Rick Riordan




Título: La sangre del Olimpo
Saga: Héroes del Olimpo #5
Editorial: Montena
Número de páginas: 464



Después de tener en mi estantería el último libro de la saga desde el mismo febrero, cuando salió, he decidido leerlo. En dos días las 450 páginas se han quedado en cero dando final a la que era una gran saga.
No sé si es que me he vuelto una inconformista con las sagas que hay actualmente en el mercado si me seguís en Goodreads y lo habéis leído, Alianzas, el libro de moda no me ha terminado de agradar, ya os contaré o las malditas esperanzas que hacen que pienses que todo va a ser genial yu luego una mierda pinchada en un palo es mejor.
No entiendo esa nota que tiene sobre cinco, un cuatro coma cuarenta y uno, cuando a mí, personalmente me ha parecido de un dos. Y siendo algo generosa. También en esto ha influido que ya paso de leer opiniones en general para evitar que me influencien sobre el libro, me limito a la puntuación y cuando no sé que libro escoger porque... ¡todos me parecen iguales!

Como está la niña me he querido sentir
después de todo.
Me distraigo del tema principal, el libro. Yo esperaba.... no sé, cosas más épicas, algo más del estilo Riordan. ¡Algo sorprendente, leñe! Y me he encontrado con un final feliz, un primer capítulo en el que no entendía nada todo el libro ha sido así en general y que la mayor parte del tiempo tenía que releer los párrafos porque me saltaba trozos o directamente, me ponía a pensar en el “¿pero qué demonios me estoy leyendo?” y al final acababa más perdida que una aguja en un pajar.
Desde el principio estaba desorientada, y ahora que lo he acabado hace una hora, sigo así. Influye mucho que haya tardado un montón en leerme el siguiente, pero oye, que si el primer capítulo no engancha tienes que forzarte a leer, y esto ha sido así durante todo el libro.

Cuidado que ahora empieza la parte con spoilers, y esta vez no va ir escondida, que si no parece que no digo nada de nada.

Tengo muchos interrogantes, como por ejemplo la cura del médico esa de la que hablan al principio que tienen que buscar los ingredientes, o que demonios hacen con un montón de fantasmas en el primer capítulo sí, he odiado con toda mi alma ese capítulo, tengo motivos, lo he leído varias veces y sigo sin entenderlo, o ya; la mejor de todas, tan sencillo acabar con los gigantes y, sobretodo, con Gea. Que es la Madre Tierra, por todos los Dioses del Olimpo no puede ser tan sencillo como que un proyectil humano y un chico en un dragón la eliminen así como así. Que son mortales no tienen ningún poder sobrenatural, por mucha profecía que haya.
A todo esto, tengo que sumarle el inicio del libro, en el Rick se disculpa por el suspense del anterior y bla, bla, bla. ¡Pero ojo! Dice de evitar el suspense menos en algún momento. ME RIO RICK RIORDAN, ME RIO MUCHO, NO HE NOTADO NADA DE SUSPENSE, SI NO UN ABURRIMIENTO MORTAL. Que no, que no, que me niego a que el final de una de las mejores sagas acabe así, con un final feliz en el que Leo vuelve a ver a Calipso. Porque claro, lo que tu piensas es en instalar a tu dragón una aguja para que te inyecte la cura del médico. ¡Claro que sí! Que vale, me alegro de que este vivo y eso, pero Leo merecía algo mejor. Porque para colmo al que se le va a reconocer el mérito de haber vencido a Gea es a Octavio. Encima. Al que ha estado tocando las narices desde el principio y reuniendo un montón de monstruos alrededor del Campamento Mestizo.
Reacción a finales injustos.
No sé que pensaría Riordan al escribir esto, pero vamos, no es el final que se merece esta saga. Vale, Jason y Piper acaban felices, Annabeth y Percy van a ir a la Universidad al año siguiente y vivirán perdices y comerán felices. Ah, y como olvidar a Hazel y Frank, que también tienen su final feliz. Y a Nico que al final se queda en el Campamento. Y a Reyna que... que vuelve a Nueva Roma, para seguir a lo mismo de antes. Son finales felices para semidioses, que se supone que son siempre perseguidos por monstruos.

Casi lo olvido, aunque no sé como. ¡Todo es tan sencillo! Ah, no, que lo he dicho antes, ops, he repetido algo No me creo que puedan vencer de una manera tan, pero tan sencilla a los gigantes que había en Atenas. Porque claro, tienen que vencer a una diosa, a unos espiritas que no sé de que van y a una serpiente en modo idiota para llegar al médico. Ah, y también van a Delfos para conseguir... ¡una margarita! Que es uno de los ingredientes más importantes para algo que te devuelve la vida, ¿lo sabíais? Ay, y el olvidado la botella con el veneno más fuerte del mundo. Irónico que el veneno con la margarita y los espíritus devuelvan la vida. Aunque no estoy nada segura de que devuelva la vida de verdad, pero oye, parece que sí.
Otra cosa que he olvidado, ¿alguien recuerda el gran secreto de Reyna? Yo no recordaba si quiera que tenía un secreto, y nada, aquí lo han dicho. No sé si es por todo el tiempo que ha pasado desde La casa de Hades o porque... vale, es por el tiempo porque si que me gustó.

A pesar de la gran decepción que me he llevado con el libro, oye, me he reído a veces. Un ejemplo es cuando Leo propone como posibilidad una guerra vía Twitter antes de ir a ver a la diosa de la victoria. Lo normal para Leo, ¿a qué sí? Pero esperaba más, no me voy a cansar de repetirlo. Esperaba mucho más, un final más épico, no un happy ending versión película romántica. Y mucha más pelea con Gea también me lo esperaba. Porque vamos, que a unas 225 páginas de acabar el libro todavía quedaran dos días para que despertara y luego encontrar con que la pelea en Atenas es más larga que la pelea en el Campamento...

No os cuento mucho más porque no hay nada más que decir. Si esperabais un gran final... no lo es. No perdáis el tiempo, y quedaros con lo que ya sabéis, que todo se va a solucionar, como siempre pasa en la literatura juvenil. Y no, no es un prejuicio contra ella, si no una gran realidad.

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